Aumento de los embarques de soja estadounidense comprados por Argentina

Ayer el USDA informó un compromiso de embarque de soja estadounidense 2018/19 con destino a la Argentina de 120.000 toneladas. Hoy miércoles se indicó otra partida adicional con el mismo destino también por 120.000 toneladas.


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Aumento de los embarques de soja estadounidense comprados por Argentina


Argentina cuenta con un stock remanente de soja 2016/17 -según datos oficiales- de 12,3 millones de toneladas. Si bien la cosecha de este año fracasó a causa de una sequía (la Bolsa de Cereales de Buenos Aires prevé que se recolectarán apenas 38 millones de toneladas, buena parte de la cual es grano verde), las industrias aceiteras locales tienen cierto resto hasta el tercer trimestre de 2018.

Pero en el último tramo del año la cosa se puede empezar a complicar porque Paraguay -abastecedor tradicional de soja de la industria argentina- podrá, con toda la furia, aportar apenas unos 2,0 millones de toneladas. Muy poco para compensar la destrucción provocada por la sequía local.

En ese marco, si un país -como la Argentina- es el principal proveedor mundial de harina de soja y los precios de ese producto están altos (aumentaron unos 25 u$s/tonelada en lo que va del presente año con perspectivas de seguir subiendo), entonces no tiene sentido quedarse sin insumo para que se corte el negocio.

El dato clave, en ese contexto, no es el hecho en sí mismo ni el volumen, sino el precio. El valor de paridad de importación de la soja estadounidense puesta en puertos argentinos, para los embarques realizados en noviembre de 2018, se encontraba ayer martes en torno a 450 u$s/tonelada versus 334 u$s/tonelada el precio de cierre de ayer del contrato Soja Rosario Noviembre 2018 del Matba (que ayer cayó 4,5 u$s/tonelada respecto del lunes luego de conocerse el dato del primer embarque encargado de 120.000 toneladas).

Un valor FAS de la Soja Rosario Noviembre 2018 de 338,5 u$s/tonelada (cierre del lunes) equivale, con una retención para ese mes del 24,5% (de acuerdo al esquema gradual de reducción vigente del derecho de exportación), a un FOB argentino del orden de 448 u$s/tonelada. Es decir: se trata de valores prácticamente arbitrados.

Al tratarse de una operación comprendida en el régimen de admisión temporaria, la normativa vigente permite deducir el costo total de importación del poroto de soja (CIF + aranceles) de la base imponible resultante de la venta externa de aceite, biodiesel y harina de soja (de manera tal que la retención sólo se aplica sobre el agregado de valor local y no sobre el insumo importado).

Si bien, en caso de acelerarse las órdenes de compra de soja estadounidense 2018/19 en las próximas semanas, tal evento debería seguir poniendo paños fríos en la posición noviembre 2018, los contratos futuros de soja correspondientes a mayo y julio próximos no deberían -en teoría- ser afectados negativamente por la noticia.

Próximamente las autoridades del Senasa deberán emitir un permiso especial de importación de soja estadounidense en el marco del régimen de admisión temporaria dado que no todos los cultivares transgénicos presentes en esa nación fueron autorizados localmente.



Fuente: Reuters







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