17/04/2018. PRODUCCIONES REGIONALES. Caña de Azúcar
En el marco del Seminario Internacional de Caña de Azúcar realizado en el INTA Famaillá, el Dr. João Luís Nunes Carvalho del Laboratorio de Ciencia y Tecnología del Bioetanol de Brasil abordó las nuevas tecnologías para la sustentabilidad de la producción de caña de azúcar.
El especialista comprobó que dentro de los costos de producción que tiene hoy Brasil, los rubros de mayor peso son la cosecha y el transporte, seguidos del arrendamiento de la tierra (en el caso de que exista), la plantación y las tareas de mantenimiento del cultivo.
Por ello, la investigación del laboratorio en el que trabaja apunta a la reducción de las operaciones de plantación y la adopción de un manejo de bajo impacto con utilización racional de insumos, reducción del pisoteo y pérdida de plantas y una mejora en la calidad y eficiencia del proceso de cosecha, tanto de tallos como de residuos.
“Con esto se espera mejorar la productividad y aumentar la edad de los cañaverales, a la vez que reducir los costos y los impactos ambientales para mejorar la sustentabilidad del cultivo. La propuesta pasar por ir haciendo un cambio gradual desde un sistema de preparación convencional del suelo, como se realiza en Tucumán por ejemplo con cosecha manual y quema de residuos, hacia otro más evolucionado de rotación de cultivos, preparación localizada del suelo, tráfico de máquinas controlado y cosecha mecanizada con nuevos métodos para dejar de quemar e incorporar los residuos a los suelos”, señaló Nunes Carvalho.
En este sentido, mostró resultados de ensayos que indican que rotando la caña con un año de crotalaria, mucuna y otras leguminosas se pueden obtener aumentos del 35% en los rendimientos del cultivo de caña posterior.
Por otra parte, el investigador expuso imágenes y mediciones elocuentes del efecto que producen las máquinas de alto peso utilizadas en la caña sobre la compactación y la pérdida de porosidad de los suelos, lo que impide la exploración de las raíces, disminuyendo el crecimiento de las plantas y, obviamente, su rendimiento final. Este tipo de comprobaciones también se mostró para Tucumán en los estudios del Instituto de Ingeniería Rural del INTA.
Ante esta problemática, la solución propuesta por el especialista brasilero es “la labranza localizada y el tráfico controlado de las máquinas en el lote. Las trochas de las máquinas, tractores y camiones que entren al cañaveral deben ser iguales y, en lo posible, circular siempre por los mismos lugares”.
