BABESIOSIS Y ANAPLASMOSIS: LA TRISTEZA BOVINA

La incorporación de razas europeas como mejoradoras de la producción ganadera en Argentina ha fracasado, con frecuencia, por la acción de las garrapatas y de los parásitos que ellas trasmiten: Babesias y Anaplasmas.


amanecer rural

Estos parásitos son responsables de un complejo de enfermedades que, en nuestro medio, se conoce bajo el nombre de "tristeza".
Las formas evolutivas de la garrapata del ganado (Boophilusmicroplus) son trasmisoras de dos parásitos: Babesiabigemina y Babesiabovis. El Anaplasma también es trasmitido por esta especie de garrapata; además, mosquitos, tábanos y moscas bravas posibilitan su difusión así como los implementos utilizados para ciertas prácticas de campo como castración, descorne o vacunación, entre otras. 

Síntomas
Estos agentes - Babesias y Anaplasma - se ubican en el interior del glóbulo rojo y, al destruirlo, originan la anemia característica. Se presenta aumento de temperatura, lento desplazamiento, estupor (pérdida de la relación del animal con el medio) y excitación.
Eventualmente, la intensa destrucción de glóbulos rojos hace que parte de su con tenido - la hemoglobina - se elimine por la orina, que presenta un color rojizo (hemoglobinuria). 

Animales sensibles
Todos los bovinos, independientemente de la edad, se enferman de tristeza. Los animales jóvenes son más resistentes, pero por causas estresantes ligadas al manejo, deficiencias nutricionales, enfermedades, excesiva carga de garrapatas, pueden contraer la enfermedad. 
Trabajos realizados en la Estación Experimental Agropecuaria INTA EL Colorado, coincidieron con experiencias de varios autores y permitieron corroborar que los derivados del cebú contraen la enfermedad.

Distribución geográfica
La tristeza del ganado bovino, enfermedad típica de zona tropicales y sub-tropicales, guarda una estrecha relación con la zona de influencia de la garrapata bovina en la Argentina: Abarca toda la región sub tropical, de aproximadamente 90 millones de hectáreas que posee una población de 10 millones de cabezas.

Aparición de brotes
Estos se presentan en los meses de verano y otoño, estaciones en que la población de garrapatas aumenta, la actividad de las Babesias es más propicia y la proliferación de insectos favorece la transmisión de los Anaplasma.

Aspectos epidemiológicos
En la región es costumbre de los productores hacer pastorear los rastrojos de los cultivos, después de haber controlado las cargas de esos cultivos con productores clorudos, fosforados y - últimamente - con piritroides. Todas estas sustancias, al tener efecto nocivo sobre las larvas de garrapata, impedirían a los bovinos recibir las descargas de Babesias para mantener el estado de "premunición".
Animales jóvenes, entre 6 y 9 meses de edad, ya no poseen la resistencia conferida por el calostro. Al exponerlos a picaduras de garrapatas cuando se los traslada a perros infestados, son propensos a adquirir enfermedad.
Peligros similares correría la hacienda de pastoreo campos inundados por períodos prolongados y que, posteriormente, es llegada a potreros altos infestados con garrapatas.
Otra situación de inestabilidad se presenta en la zona central de la provincia de Formosa donde, con un régimen de lluvia de 700 mm.anuales, las poblaciones de garrapatas avanzan y se repliegan de acuerdo a las condiciones climáticas. En este caso los animales pasarían largos períodos sin cargas de garrapatas, con la consiguiente pérdida del estado de "premunición". 

Medidas de control
Son conocidos los baños garrapaticidas; actualmente los comercio ofrece productos de poder residual, que además tendrían restos sobre las moscas picadoras.
Es importantes recomendar la higiene del material que se emplea en las operaciones de descorné, castración, vacunación, etc.; si se tratan animales de diferentes categorías con los mismos instrumentos se favorece la trasmisión de Anaplasma.
La "premunición" controlada es de gran valor para los animales que provienen de campos limpios y son introducidos en la zona sucia de garrapata.

Para los animales enfermos se recomiendan fármacos específicos para cada uno de los parásitos: piroplasmicidas en el caso de Babesias, antibióticos del grupo de las oxitetraciclinas para Anaplasma. 

Es importante:
Reconocer la enfermedad y considerar que Babesia y Anaplasma, por ser agentes diferentes, responden a tratamientos diferestes. 
Recordar que los animales de la zona pueden contraer la enfermedad, incluso los derivados del cebú.
No utilizar métodos de control que no estén suficientemente evaluados. 

Qué es la Tristeza Bovina 
Es una afección causado por tres agentes distintos, dos son parásitos denominados Babesias (B. bovis) y (B. bigemina) y una Rickettsia Anaplasma marginale, ubicada entre una bacteria y un virus. 

Dónde se encuentra 
En la sangre de los bovinos, donde provoca uno destrucción masiva de glóbulos rojos, que se traduce en muerte del animal. 

Quién las transmite 
El único vector de Babesiosis es la garrapata común del bovino. 
Anaplasma marginale es transmitida, además de la garrapata común de los bovinos, por los tábanos, Stomoxis spp, por tacto rectal, agujas hipodérmicas, descornadores, castración, inoculación de sangre. 
Por ello el área de distribución de la Anaplasmosis es superior a la de garrapata común del bovino. 

Epidemiología de la enfermedad 
En nuestra zona, los terneros deben recibir la primera infestación a partir de los 20 días de vida para Babesiosis y a los 35 - 45 días para Anaplasma. 
Los animales jovenes, hasta los nueve meses de edad, son resistentes a las tres enfermedades. Después, pueden contraer clínicamente la enfermedad, aunque sean de la zona endémica de garrapatas. 

Cómo se previene 
Existen vacunas producidas por el INTA, (hemovacuna INTA) que contienen agentes atenuados de Babesias spp y Anaplasma central para contrarrestar a Anaplasma marginal e (de campo). 

A quiénes 
Se inmunizan animales que tengan entre 3 y 9 meses de edad. 

En animales adultos 
Toros y vacas vacías 
En estas categorías se pueden alternar, siguiendo un esquema de inmunización, la hemovacuna INTA y medicamentos específicos a media dosis. La inmunización debe ser controlada por un Médico Veterinario. 

En Vacas Preñadas 
Están contraindicadas las hemovacunas INTA. En caso de brotes de la enfermedad en esta categoría, primero se recurre al diagnóstico de los agentes causales, mediante un Médico Veterinario. 

En los animales clínicamente enfermos 
- Tratar con medicamentos según el diagnóstico. 

Al resto de la tropa afectada 
- Se puede tratar con media dosis del fármaco específico.  



Fuente: Méd. Vet. Carlos A. Luciani INTA. EEA Colonia Benítez.







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