MANEJO DE TOROS PARA SERVICIO

Revisación y elección de los toros de reposición


amanecer rural

REVISACIÓN DE LOS TOROS
Cada año se examinan los toros para rechazar aquellos con limitada capacidad funcional o
reproductiva. Esta evaluación incluye una serie de etapas, en principio en el corral se observa el estado nutricional y el desplazamiento de los toros para detectar lesiones en pies, manos,
pezuñas y articulaciones. El toro debe moverse con normalidad y no presentar trastornos en el
aparato locomotor que dificulte la monta. Luego en el cepo se procede a:
* Revisación del desgaste de dientes y examen ocular.
* Examen clínico del aparato reproductor.
*Raspajes prepuciales para detectar enfermedades infecciosas.
A parir de los 7 años de edad, es común observar un desgaste dentario que afecta la cosecha de forraje y por lo tanto la condición corporal. Los toros con medio diente o problemas oculares deben eliminarse. Los toros con escasa o nula pigmentación alrededor de los ojos son susceptibles a queratoconjuntivitis que predispone a ulceras y lesiones oculares o en estado avanzado la presencia de nube en la córnea que afectan la capacidad visual, importante para detectar las vacas en celo.
El veterinario examina el aparato reproductor, que implica una revisación externa de prepucio,
escroto, circunferencia escrotal, pene, testículos, tono testicular y epidídimo e interna de vesículas seminales.
La circunferencia escrotal se correlaciona con el volumen, peso testicular y producción
espermática. Es una característica de alta repetibilidad y heredabilidad y está asociado a la
pubertad sexual de las vaquillonas. En su evaluación como criterio de selección deben
considerarse factores que influyen sobre la misma, como la edad, raza, peso, nutrición y estación del año.
Estos exámenes requieren tiempo, solo para la determinación de enfermedades venéreas de
trasmisión sexual como campylobacteriosis y trichomoniasis, se requieren tres muestras de
raspajes prepuciales tomadas en intervalos de 15 días.
Una vez finalizados los exámenes anteriores y descartados los toros que presentan enfermedades venéreas o anormalidades insalvables en el aparato locomotor o reproductor, se realiza la prueba de capacidad de servicio. Esta evaluación se realiza en un corral con hembras sujetas a cepos durante 20 minutos y los toros se clasifican en alta, media y baja capacidad de servicio de acuerdo al interés (libido) y números de montas completadas. También es posible observar defectos en el pene como desviaciones en espiral, fallas en la erección o lesiones en caderas o columna, que solo se aprecian en el servicio. Los toros de baja capacidad de servicio se eliminan.
La selección de toros debe realizarse con suficiente antelación al servicio para presupuestar la
reposición de los toros que se descartan. Los raspajes pueden realizarse una vez finalizado el
servicio, mientras que las demás evaluaciones en el otoño antes que comiencen los remates de las cabañas de reproductores. Por otra parte, las observaciones antes del período invernal son importantes para mejorar la alimentación de los toros con baja condición corporal. Es importante que alcancen el servicio con óptima condición corporal (CC 6), considerando que durante el mismo pierden peso, pudiendo afectar negativamente su capacidad reproductiva. 

ELECCIÓN DE LOS TOROS DE REPOSICIÓN
La primera motivación para decidir la elección de un toro es la fenotípica, se busca un toro con características deseables para la región, buenos aplomos, pelo corto, pigmentación ocular, prepucio corto no pendular, buena conformación con adecuada proporción y distribución del tejido muscular en las zonas de mayor valor comercial, condición corporal óptima y un tamaño que se adapte al sistema de producción.
Las características fenotípicas deseables deben complementarse con el mérito genético del toro.
Los DEPs (Diferencia Esperada entre Progenies) son una herramienta de selección comparativa, predice el comportamiento de la descendencia de un toro en referencia a los toros incluidos en la base de datos utilizada en la valoración genética. El criador selecciona la genética que introduce en el rodeo, sus objetivos deben contemplar caracteres heredables (mide qué proporción de la variabilidad de una característica es causada por diferencias genéticas entre animales) y sus correlaciones genéticas. La selección por mayor peso al destete, característica de mediana heredabilidad, está correlacionado o asociado a un incremento en el peso a los 20 meses y a edad adulta. Es decir, que aumentaran los requerimientos nutricionales de las vaquillonas y vacas adultas, lo cual no es aconsejable para un sistema de producción con limitaciones alimenticias. El mayor potencial para peso al destete no se expresará en pobres condiciones alimentarias.
En principio se establece el tamaño corporal de las vacas que pretendemos para nuestro sistema de producción, para luego elegir el toro acorde a dicha estructura corporal. El frame score es un indicador que permite proyectar el tamaño corporal de un vacuno adulto y posee alta heredabilidad (0,50 a 0,60). Se calcula con una fórmula que incluye la altura a la grupa y la edad del animal, estableciendo una escala de 1 a 9, donde los animales de tamaño estructural chico se clasifican en los valores mínimos y los animales de gran tamaño en la parte superior de la escala.
Según la misma un macho que tiene una alzada al destete de 99 a 108 cm, es de frame mediano de 4 a 5 (Di Marco, 2006).

 En el NEA predominan las razas Braford y Brangus, con frames que varían de 4 a 7, si
consideramos que para los rodeos de la región un frame de 4 a 5 es el aconsejable, la selección del toro debe contemplar un frame de estas características. Dentro de estos límites, se elegirán toros con DEPs para bajo peso al nacer que está relacionado a facilidad de parto, peso destete o peso a los 18 meses de edad y circunferencia escrotal, asociado a pubertad en hembra y cantidad de semen en el macho.
De manera empírica, el peso adulto de una vaca multiplicado por 1,5 resulta en el peso adulto del toro equivalente a su tamaño genético (Molinuevo, 1998). Es decir, que un rodeo de vacas de 420 kg (al momento del servicio) entoradas a lo largo de los años con toros de 630 kg, no variará en su tamaño genético a través de sucesivas generaciones.
Un aspecto importante a considerar es la condición corporal, se debe evitar la elección de un toro sobrealimentado con una condición corporal por encima de 6 (escala 1 a 9). Un excesivo peso del toro, implica una sobrecarga de sus miembros posteriores durante el salto y exposición a lesiones en los mismos. Por otro lado, se demostró que sufren una fuerte pérdida de peso por el cambio de alimentación, lo que repercute negativamente en su calidad seminal.
MANEJO EN EL SERVICIO

Con sanidad controlada, el potencial reproductivo del toro está determinado por su capacidad de servicio y circunferencia escrotal. El potencial reproductivo es determinante sobre la cantidad de toros a emplear cada 100 vacas en servicio, con un potencial elevado basta con un 2 % de toros y en potreros con monte y extensos aumenta de 3 a 4 %.
Los toros establecen entre sí relaciones de dominancia que son dependientes de la edad de los toros, los toros de 2 y 3 años se subordinan a los de mayor edad. Por lo tanto, no deben mezclarse con toros adultos, porque estos últimos impiden o limitan la monta de los toros jóvenes.
La rotación de toros durante el servicio no es recomendable, el nivel jerárquico entre ellos puede provocar peleas, distrayendo a los mismos en su actividad de monta e incrementando el riesgo de lesiones.
El personal que recorre los potreros debe prestar atención al comportamiento de los toros, apartando del potrero a toros agresivos que impiden la actividad del resto. En los casos de observar lesiones en el aparato reproductor o motriz, se debe retirar del rodeo y el reemplazo dependerá de la etapa transcurrida durante el servicio. La sustitución no es necesaria promediando o finalizando la época de servicio y con toros de alta capacidad. 
 



Fuente: Daniel Sampedro







Notas Relacionadas