Aconsejan intensificar los monitoreos ante la presencia de oruga de las leguminosas y cogollera

Los especialistas del INTA Paraná destacaron la importancia de continuar con los monitoreos, principalmente en los lotes de soja. En este sentido, señalaron que se vio un incremento en las capturas de adultos de la “oruga de las leguminosas” y “oruga cogollera”.


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Aconsejan intensificar los monitoreos ante la presencia de oruga de las leguminosas y cogollera


Además, en las trampas se detectó presencia de trips, orugas y chinches fitófagas. Por este motivo, destacaron que se debe continuar con los monitoreos frecuentes.

 

La Estación Experimental informó que en hasta el 27 de febrero se detectó el incremento de la capturas de adultos de Anticarsia gemmatalis, oruga de las leguminosas y de Spodoptera frugiperda, oruga cogollera.

 

Además, la captura de mariposas del complejo Helicoverpa y de Rachiplusia nu “oruga medidora” fue elevada,.

Ante esta situación, los especialistas sugieren intensificar los monitoreos principalmente en los cultivos de soja. Esto es debido a la presencia de “oruga de las leguminosas” y posibles daños en foliolos y vainas.

 

“En relevamientos efectuados en lotes de la experimental, como así también, en aquellos realizados por profesionales asesores, se registran poblaciones importantes de larvas y adultos de trips”, informaron los especialistas.

 

Los trips son insectos pequeños que generalmente pasan inadvertidos, comentaron desde el INTA. “La especie más común en Entre Ríos es Caliothrips phaseoli, conocida vulgarmente como trips del poroto”, agregaron desde la Estación Experimental.

 

Las larvas son amarillas, sin alas y producen más daño que los adultos porque desarrollan poblaciones numerosas. Los especialistas señalaron que la presencia se puede advertir por la gran cantidad de puntos negros depositados en los foliolos, los que corresponden a las deyecciones. Los adultos son de coloración gris intenso y sus alas son claras y oscuras en forma alternada.

 

Según el informe, se detalla que estos producen daños directos a través de la oviposición y/o alimentación. “Se estimaron pérdidas en el rendimiento del 10 al 20%, afectando peso y número de granos, tasa de fotosíntesis, conductancia estomática y transpiración (Gamundi et al., 2005)”, señalaron desde el INTA Paraná.

 

Por su parte, los especialistas recordaron la importancia del monitoreo permanente en los lotes. Aseguraron que garantiza el éxito en la toma de decisiones.



Fuente: Campo en Acción







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