No cierran los números para la nueva siembra encienden una preocupante alarma

Comenzamos a analizar la nueva campaña de granos finos. Ante una gran depresión de los precios es muy importante hacer un análisis de los márgenes brutos y analizar las variables a ajustar para poder ser los mas eficiente posible en este comienzo de la campaña 2024/25.


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No cierran los números para la nueva siembra encienden una preocupante alarma


La baja de los precios internacionales, mientras siguen caros los fertilizantes, complica los márgenes de la cebada y el trigo

Comenzamos a analizar la nueva campaña de granos finos. Ante una gran depresión de los precios es muy importante hacer un análisis de los márgenes brutos y analizar las variables a ajustar para poder ser los mas eficiente posible en este comienzo de la campaña 2024/25. Analizando los márgenes de la fina nueva, vemos que los números para producir cebada o trigo no cierran bajo este escenario. Cuando hacemos una comparación con los márgenes de la campaña pasada vemos grandes diferencias. Dentro de los costos directos podemos ver diferencias en dos grandes grupos: alquileres y fertilizantes.

Si planteamos alquileres en quintales y suponemos que los campos se pueden arrendar en los mismos quintales de soja, en dólares hay una baja importante en este rubro, esto corresponde a una baja en el valor de la soja MatbaRofex, posición mayo 24 y la posición mayo 25. Esta baja es de aproximadamente un 20%. Pasando el alquiler, por ejemplo, en un campo en Ochandio, sudeste de Buenos Aires, de 12 quintales de soja por hectárea, pasa a pesar del 33 al 28%, dentro de los costos totales.

En cambio, en el rubro fertilizantes, sucede todo lo contrario. Es la peor relación insumo producto en mucho tiempo. Si analizamos un paquete tecnológico de 100 kg de DAP y 250 kg de urea para producir cebada (presupuesto), el año pasado ese paquete tecnológico se pagaba con una tonelada de cebada y esta campaña se paga con 1,6. Y pasó a representar de un 21% a casi un 30% de los costos totales directos.

El incremento se da en ambos productos, pero sobre todo en la urea. El costo del paquete de fertilización se incrementó un 28% per se. Los costos totales son elevados, pero no mucho más que la campaña pasada, pero la gran diferencia son los precios bajos de los comodities hacen que los ingresos netos esperados sean muy bajos, un 20% más bajo que la última campaña, siempre planteando obviamente mismo rinde que el presupuesto de la campaña anterior.

Siendo tan así, que los rendimientos de indiferencia de este año, que no es más que le rendimiento con el cual el negocio sale empatado, son rendimientos muy cercanos al rendimiento promedio esperado. Hay una paridad en el costo de producir una tonelada de cebada y el precio neto de venta esperado, lo cual hace que el negocio no funcione. Creemos que hay que esperar para ver qué pasa con los precios de los fertilizantes, por otro lado, se deberían acomodar los precios de los alquileres, ya que no es viable la producción agrícola con esta relación, en un contexto de alta probabilidad de año Niña, y con todos los riesgos que esto representa.

Otra variable para analizar es qué va a pasar con los precios de la cebada en un año Niña. Según Emanuel Del Giorgio, trader FOB de Alea, el mercado internacional de cebada ha tenido una tendencia bajista sin tregua desde que comenzó el año. Lejos quedaron los excelentes precios que tuvimos en las últimas tres campañas.

Desde que comenzó la cosecha a mediados de noviembre hasta hoy, los precios FOB bajaron aproximadamente US$30. En la Argentina en particular, vimos una corrección fuerte el año pasado a raíz de la solución del conflicto que mantenían China y Australia y que permitía a la Argentina ser uno de los principales proveedores del gigante asiático.

A partir del último trimestre de 2023 China reabrió las puertas a la cebada australiana y desde entonces el país vecino ha vuelto a convertirse en su principal proveedor. Si las exportaciones quedan por debajo de los 3 millones de toneladas, podríamos terminar este año con stocks muy elevados en comparación a las últimas campañas.

Con este escenario, si llegamos al momento de siembra con grandes stocks, podríamos ver una reducción en el área de cebada y eso podría ser alentador para los precios 24/25 donde también se espera una baja en las tasas de interés internacionales y una recuperación de la actividad económica en general.

El movimiento de los precios de esta campaña va a depender en gran medida de qué tan competitivos podamos ser respecto a otros orígenes para seguir abasteciendo a China y cómo evolucione su comportamiento de compras. Para la campaña nueva todavía no hay precios claros, pero hay que mencionar que la siembra de la cebada de primavera recién está comenzando en hemisferio norte y cualquier problema climático podría darle buen soporte a los precios de calidad Cervecera.

Por otro lado, el pronóstico de un año Niña implicaría potenciales excesos de agua para Australia que puedan perjudicar la calidad de su próxima campaña. Esto daría firmeza a la prima de maltera sobre forrajera.



Fuente: La Nacion







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