24/01/2018. AGRICULTURA. Algodón
CUIDADOS DESDE EMERGENCIA A PRIMER PIMPOLLO
Esta etapa dura aproximadamente 35 días. En este período, el cultivo resulta poco atractivo para el picudo. No obstante, se debe seguir controlando las capturas en las trampas de feromonas.
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Gráfico 1. Los Huevos son depositados uno por uno. Las hembras perforan los pimpollos o cápsulas tiernas y en cada hueco depositan un huevo. Pueden colocar un promedio
de 100 – 300 huevos en su ciclo de vida.
Gráfico 2. El picudo se alimenta preferiblemente del polen del algodón, de botones florales, de pimpollos ó, de flores abiertas.
Gráfico 3. Daños en floración.
Revisar la trampa cada siete días y cada vez que se tiene capturas de picudo, deben realizarse aplicaciones en los bordes externos del cultivo en un ancho de 30 metros aproximadamente, para evitar la colonización del lote. Cada vez que se pulverice debe incrementarse en 30 metros el ancho de la aplicación.
Se debe observar la emergencia de malezas procediendo a su control para evitar la competencia con el cultivo.
Recordar:
*Monitorear el desove de la oruga capullera en algodones no Bt para evitar los ataques tempranos.
*Monitorear la presencia de pulgones del algodón debido a que pueden transmitir la enfermedad azul en sus dos variantes.
*Aplicar glifosato en cobertura total hasta la 4ta hoja extendida en los cultivares de algodón RR y BtRR. De ahí en adelante el herbicida glifosato puede afectar los órganos reproductivos en diferenciación provocando su caída.
DESDE PRIMER PIMPOLLO
HASTA FIN DE FLORACIÓN EFECTIVA
Esta etapa dura desde los 35 días a los 80 días después de la siembra. El objetivo principal es concentrar la floración y de esta forma lograr el acortamiento del período de fructificación a fin de reducir el tiempo de exposición al picudo y por lo tanto disminuir el número de aplicaciones de insecticida.
La trampa, una vez que se inició el pimpollado deja de ser atractiva para el picudo y cuando las infestaciones son iniciales, es difícil detectar el insecto en el cultivo. Por esa razón es necesario comenzar el monitoreo de pimpollos en los bordes del lote, en los primeros 30 metros buscando el daño que realiza el picudo en los pimpollos superiores. Se debe prestar especial atención a plantas de mayor altura, éstas son más atractivas para el insecto.
La fase de plena floración del cultivo es el período más difícil para controlar al picudo.
Los recuentos de los pimpollos del algodón dan información sobre la población de la plaga.
El trabajo de los reconocedores de plagas es clave en este momento.
Los recuentos de pimpollos o botones florales se deben hacer a intervalos de 5 días, en diferentes
lugares del lote, particularmente en los sectores donde las trampas hayan registrado mayor
captura (previo al inicio de la floración).
En lotes de hasta 50 ha, establecer 10 lugares de muestreos. En los de mayor tamaño aumentar
los puntos de muestreo. En cada lugar revisar el tercio superior de la planta y registrar los daños
de alimentación y de oviposición en 20 pimpollos.
Cuando se alcanza el nivel de 3% de los pimpollos dañados, hacer 4 aplicaciones totales de
insecticida sucesivas a intervalos de no más de 5 días, en todo el lote.
Si ocurriera un derrame floral en las dos primeras semanas (comienzo de floración) o no se cumpliera el intervalo de 5 días entre aplicaciones, reiniciar la secuencia de insecticidas.
Si existe una alta presión de picudo en los bordes (detectando presencia de adultos y/o daños en
cápsulas) y se tiene bochas menores de 3 cm de diámetro,se deberán continuar las aplicaciones.
En esta etapa las aplicaciones totales se realizan cada 7 días (dos o más hasta que la bocha a cuidar tenga más de 3 cm de diámetro).
DESDE FIN DE FLORACIÓN EFECTIVA
A PRE-COSECHA
Esta etapa se reconoce por la aparición de una flor blanca en primera posición cuatro o cinco nudos por debajo del ápice. Esto se aprecia en forma práctica desde el borde del lote cuando se observan flores blancas sobre el estrato superior del follaje del cultivo, esta etapa se conoce como "cutout".
En caso de producirse una reactivación del crecimiento vegetativo después del fin de la floración efectiva, debido a condiciones propicias del ambiente, se deberá evitar la generación de rebrotes mediante aplicaciones sistemáticas de un regulador de crecimiento en dosis máximas cada vez que la condición del cultivo lo requiera.
Al no haber flores o polen disponible, el cultivo deja de ser atractivo para el picudo, emigrando a otros lotes, por lo que se sugiere reactivar las trampas para detectar el movimiento del picudo.
Recordar:
*Monitorear la presencia de oruga de la hoja.
*Monitorear las poblaciones de pulgones y mosca blanca.
*Revisar el grado de enmalezamiento del lote.
*No permitir nuevos rebrotes y nuevas camadas de floración.
*Colocar y controlar nuevamente las trampas.
PRE-COSECHA: LA DEFOLIACIÓN DEL CULTIVO.
A fin de lograr una correcta cosecha mecánica del cultivo, es necesaria la aplicación de defoliantes que aceleren la maduración de las últimas cápsulas y preparen el cultivo para la cosecha.
Para determinar el momento oportuno de aplicación del defoliante, se debe observar la presencia de una cápsula con sus paredes rajadas en alguna de las últimas cuatro ramas con cápsulas en primera posición o bien cuando el 50 al 60 % de las cápsulas han abierto y el resto de las cápsulas están maduras. Se reconoce la madurez de una cápsula porque al cortarla se observan en su interior las semillas con su cubierta de color negro.
Se deben utilizar preferiblemente productos defoliantes y aceleradores de la maduración. En presencia de picudo es recomendable aplicar un insecticida conjuntamente con el defoliante para disminuir la población de picudos que emigrarán hacia los refugios invernales.
Una vez lograda la defoliación, se debe evitar tanto el rebrote del cultivo como la presencia de malezas que aportarán materiales extraños a la fibra (pimienta).
Para evitar rebrotes durante el período de maduración de cápsulas que se extiende desde el fin de floración efectiva (a los 80-85 días de la siembra) hasta el momento de la cosecha (150 días desde la siembra), se realizan aplicaciones de regulador de crecimiento (cloromecuato 75% entre 100 y 200 cc/ha) cada vez que el cultivo lo requiera.
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