03/12/2018. REGIONALES. Santa Fe
El 62% de la cría se encuentra ubicada en centro-sur del departamento caracterizado por tener variada clase de suelos, suelos clase III (30,5% de la superficie del Dpto.) de aptitud agrícola-ganadera, susceptible a erosión, medianamente fértil, con elevado contenido de arena; suelos clase IV (13% de la superficie del Dpto.) con aptitud ganadero-agrícola, suelos con excesos de agua, drenaje pobre, presencia de sales, baja fertilidad; suelos clase VI (10% de la superficie del Dpto.) de aptitud ganadera, con problemas de drenaje, fertilidad y presencia de sales. También se encuentran en pequeña proporción suelos IV y VI en el centro-norte del departamento. Los rodeos son mayoritariamente de origen Bos Taurus, con predominio de la raza Aberdeen Angus. Los sistemas de cría son pastoriles, el servicio natural es el más frecuente, la inseminación artificial está más implementada en vaquillonas. La estación de servicio es en primavera en la mayoría de los establecimientos, durante los meses septiembre-octubre-noviembre-diciembre. Por lo tanto, la parición es estacional en junio-julio-agosto-septiembre, coincidiendo la lactancia y servicio con la estación de mayor producción de pasto.
Durante los últimos años y debido a los relativamente bajos procreos de la zona, se planteó el objetivo de monitorear las pérdidas reproductivas de rodeos de cría, determinando el momento y sus posibles causas. (AAPA, 2014. Monitoreo de ineficiencias reproductivas en un rodeo de cría del sur de la Provincia de Santa Fe. Correa Luna, M.C.1 , Morlacco, M.B. 1 , Delgado, G. 2 , Tome, H. 3 . 1 INTA Venado Tuerto, 2 Facultad Ciencias Veterinarias UNR, 3Actividad Privada). El objetivo del presente trabajo es identificar las pérdidas evitables más comunes halladas en rodeos de cría del Sur de Santa Fe, ordenando el momento o las etapas cuando se producen las mismas.
Momentos del ciclo de cría:
La eficiencia productiva se mide con algunos indicadores como las tasas de preñez, de parición y de destete, para todas las categorías del rodeo. Con el uso de ecografías también es posible verificar ciclicidad del rodeo, pérdidas embrionarias y preñez temprana. Las pérdidas embrionarias ocurren desde la concepción hasta el día 42 de gestación, los abortos hasta el día 260 de gestación, a partir de los 260 días hasta parto se denominan partos prematuros (vivos o muertos).
Primera etapa (Servicio-Tacto): Desde el momento o fecha que ingresan los toros al rodeo o inicio del servicio, hasta el momento que se realiza tacto o palpación rectal a las vacas para diagnóstico de preñez. Este se realiza a los 60-90 días de finalizado el servicio, actualmente es frecuente el uso de ecógrafos para un diagnóstico más temprano de preñez, a los 30 días de retirados los toros.
Segunda etapa (Tacto-Parición): Desde el tacto hasta que finaliza la parición. Antiguamente a medida que nacían era el momento de la señalada de los terneros, donde era frecuente el uso de una oreja para la señal del establecimiento y la otra para señal del año de nacido.
Tercera etapa (Parición-Destete): Desde el final de la parición hasta que se destetan o desmamantan los terneros logrados, que es cuando se apartan de las vacas y se hace la marcación a fuego en el cuero de los terneros con la marca del establecimiento. En algunos casos es el momento de la comercialización y retiro de los animales o “destete contra culata del camión”.
Pérdidas o Mermas productivas:
De esta manera considerando las mencionadas etapas, es posible caracterizar las posibles pérdidas o mermas en los diferentes momentos del ciclo productivo del rodeo. En este informe serán identificadas a modo de resumen y en forma muy general, las posibles pérdidas que pueden ocurrir durante cada una de las tres etapas mencionadas del ciclo de la cría.
En casos donde existan enfermedades venéreas, a pesar de los sucesivos “raspados” es posible que queden toros, sobre todo los más viejos, con Trichomonas o Campylobacter, pudiendo contagiar a las vacas. Esto puede provocar abortos embrionarios que normalmente no se detectan cuando son tempranos porque estas vacas pueden volver a preñarse al final del servicio, observándose solo al tacto mayor cantidad de preñez “cola” o preñeces tardías. También es posible que ocurran pérdidas asociadas a otras enfermedades como Neosporosis, Brucelosis, enfermedades virales que también dan abortos como IBR, DVB, otras. En caso de detectar vacas con síntomas de pérdida de preñez (sucias, en celo) es posible tratar de diagnosticar la causa del aborto con muestreos de sangre y de mucus cérvico-vaginal, los que se deben acondicionar y remitir a laboratorios de diagnóstico veterinario. Las pérdidas o falta de preñez también pueden asociarse a la genética del rodeo. Estos casos se relacionan rodeos con inadecuados biotipos de vacas para determinados ambientes, o sea razas poco adaptadas a ambientes muy hostiles (clima adverso, pastos/agua de mala calidad, garrapatas, etc.). Pueden incluirse problemas dentro de una misma raza por biotipos con frame muy grande o demasiado chico, que no se adaptan bien a las condiciones del terreno o del pastizal, por múltiples motivos. Deben agregarse también casos de pérdidas de preñez por golpes debido a excesivos movimientos del rodeo, malas instalaciones (corrales, mangas, cepos, pisos, etc.) o directamente por mal trato a la hacienda con perros malos o golpes innecesarios durante el manejo.
Últimamente se cuestiona cada vez más las restricciones alimenticias durante el último tercio de la gestación para que sea de menor tamaño el ternero al parto, porque si se restringe en esta etapa es cuando se definen muchas características productivas futuras del ternero, como mal desarrollo reproductivo en hembras, menor calidad carnicera por menor relación músculo/grasa, menor capacidad de engrasamiento, y otros. Esto se estudia hoy como la adecuada nutrición fetal durante las distintas etapas del desarrollo del feto. También se cuentan en este período las posibles pérdidas de preñez por golpes debido a malas instalaciones (corrales, mangas, cepos, pisos, etc.) o directamente por mal trato a la hacienda con perros malos o golpes innecesarios durante el manejo.
Cálculo de las mermas:
En primer lugar hay que definir bien cada ítem, para poder clarificar bien el momento de las pérdidas.
% PREÑEZ: es la cantidad de vacas preñadas al tacto o ecografía, sobre el total de vacas ingresadas a servicio.
% PARICIÓN: es la cantidad de vacas paridas, sobre el total de vacas ingresadas a servicio.
% DESTETE: es la cantidad de vacas que destetaron un ternero, sobre el total de vacas ingresadas a servicio
A continuación en las tablas Nº 1 y 2, y en los gráficos Nº 1 y 2, se presenta un caso habitual de muchas zonas del país, que marcan o destetan un 70% de terneros. Deben ser observadas las proporciones o porcentajes de pérdidas según la etapa considerada, comúnmente en la primera etapa el nivel de pérdidas es mayor a la mitad del total de pérdidas, o sea desde ingresadas a servicio y no preñadas o vacas vacías.
Del mismo modo a continuación en tablas Nº 3 y 4 y en gráficos Nº 3 y 4, se presenta otro caso con muy buena performance reproductiva, elevado índice de preñez, se atiende muy bien la parición y la sanidad en general, logrando elevado porcentaje de destete. En este caso debe observarse que si bien los niveles productivos son notoriamente mayores al caso anterior con mermas notablemente inferiores, se mantienen las proporciones entre las distintas mermas. A pesar de lograr buena preñez, las pérdidas por no preñadas son mayores al 50% del total de las mermas. Se insiste que por lo general ocurre que las vacas vacías son las que definen la mayor proporción de pérdidas del rodeo de cría.
Discusión y Conclusiones:
De este análisis surge que si bien es importante ocuparse en disminuir todas las mermas o niveles de pérdidas en todas las etapas del ciclo de cría, debe tenerse en cuenta que el que define generalmente el mayor nivel de pérdidas es el de vacas no preñadas (preñadas/total) representando mínimamente el 50% del total de pérdidas. Por lo tanto que si se eleva la preñez y si se mantienen las proporciones de las otras mermas o niveles de pérdidas, o sea preñez/parición y parición/destete, éstas son arrastradas hacia arriba por mayor preñez. Dicho de otra forma, se parte de un techo productivo notoriamente superior con más vacas preñadas, logrando mayor parición y mayor destete. Como ejemplo puede mencionarse un caso en los Bajos Submeridionales Santafecinos, que tenía una preñez histórica que no llegaba o no superaba el 70%, y durante años se trabajó tratando de disminuir la mortandad de terneros (destete cercano a 60%), logrando con diferentes medidas sanitarias un destete del 65%. Pero posteriormente se concluyó que el biotipo racial utilizado no era el más adaptado a las duras condiciones ambientales subtropicales, entonces con solo utilizar otra raza de mayor rusticidad, la preñez aumentó por encima del 80%, y el detete superó el 70% (Est. “Los Charabones”, Fundación Aragón, 1980-1985). Por lo tanto, deben considerarse todos los aspectos posibles para aumentar la preñez, para ello el manejo de la alimentación es imprescindible, el uso de la Condición Corporal (SC) en vacas de cría es una herramienta fundamental para estimar y corregir -de ser necesario- el estado nutricional del rodeo. Todo lo mencionado en sanidad y reproducción van de la mano con la comida, y por supuesto siempre se debe considerar la genética más adecuada al ambiente productivo. Posteriormente, se deberán continuar los esfuerzos para elevar la parición a través de usar solo toros probados con facilidad de parto, recorrer las pariciones sobre todo en vaquillonas, capacitar al personal en ayuda al parto, atención del recién nacido; asegurar un buen manejo sanitario de enfermedades reproductivas, venéreas y neonatales, buen manejo de la alimentación de vacas preñadas, buen trato a la hacienda y respetar normas de bienestar animal. Finalmente para aumentar el destete en las etapas finales del ciclo, se deberá asegurar no solo buenas pasturas sino también buena sanidad, apuntando a evitar diarreas y neumonías. Para aumentar el peso al destete, deberá ajustarse la fecha o el momento de acuerdo al estado de las pasturas, o si el 0,0 10,0 20,0 30,0 40,0 50,0 60,0 70,0 80,0 90,0 100,0 preñez parición destete 92,0 90,0 88,0 No preñ/tot 8,00% No par/preñ 2,17% No dest/par 2,22% clima permite mantener más tiempo al rodeo con cría sobre pasturas, antes de destetar y que las vacas ingresen al pastoreo de rastrojos. Las condiciones templadas del sur de Santa Fe son muy benignas por lo tanto se puede utilizar cualquier raza porque seguramente va a funcionar bien, pero deben tenerse en cuenta otras consideraciones como por ejemplo tratar de producir más por rodeo y por hectárea (mayor carga). Entonces se explica la gran utilización de razas británicas por su mayor fertilidad que incluye precocidad, que también logra más estabilidad en la calidad de carne (engrasamiento y terneza), todo esto permite lograr los mejores precios en el mercado de haciendas. En la actualidad se obtiene con la mejor carne del mundo, la mayor rentabilidad dentro de las actividades agropecuarias.
Debe quedar claro que todo lo escrito en este resumen de ideas y experiencias propias y ajenas, son solo recomendaciones generales algunas más conocidas que otras, y algunas más aplicadas que otras. Pero lo más importante siempre es el factor humano, porque en definitiva todo pasa por la necesidad, el interés o el gusto por la actividad de cría. Entonces de poco sirve esto si no se tiene personal de ganadería apto y capacitado periódicamente, esto implica mayor exigencia hacia ellos y la correspondiente devolución, o sea una adecuada remuneración y buenas condiciones de vida, para lograr los resultados buscados. También significa que el asesoramiento veterinario debe estar presente en cada una de las etapas del ciclo productivo del rodeo de cría, apoyando al productor, al personal y a la mejor ganadería argentina.