La puesta en marcha de la normativa fitosanitaria para garantizar el movimiento internacional de las semillas

Es en este sentido que uno de los temas más sensibles abordados en la primera y última jornada del 7° Congreso de Semillas de las Américas – llevado a cabo del 9 al 11 de septiembre en Hilton Hotel Buenos Aires - ha sido “La facilitación del comercio de semillas haciendo hincapié en la puesta en marcha de la normativa internacional fitosanitaria.


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La puesta en marcha de la normativa fitosanitaria para garantizar el movimiento internacional de las semillas


“Con la implementación de la normativa internacional fitosanitaria N° 38 se buscan encontrar iniciativas público-privadas que garanticen un movimiento seguro y ágil de semillas cumpliendo con regulaciones basadas en ciencia”, sostuvo Natalia Fernández Eraso (gerente de asuntos regulatorios de Bayer Cono Sur y representante de ASA), encargada de la moderación del panel integrado por Stephanie Bloem y Ernesto Galiani (Nappo & COSAVE) y Elena Gatti (SENASA).

“Hace cinco meses, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentario (SENASA) junto con la Asociación Semilleros Argentinos (ASA) tuvieron la iniciativa de armar un Plan Piloto marzo 2019 en el marco de implementación de la norma internacional NIMF N°38. Se busca identificar la plaga. Esta norma incorpora otro propósito de las semillas, el de “movilidad” y está desarrollada para regular las actuales exigencias fitosanitarias por parte de los Organismos Públicos que son elevadas, difíciles de cumplir y dificultan la propia movilidad de las semillas. Este plan piloto lo haremos con “semilla experimental”, concluyó Gatti.

Asimismo, se conoció una herramienta tecnológica para facilitar el proceso de certificación fitosanitarios electrónicos entre los Organismos Públicos. Se trata del sistema nacional E- Phytos, que permite la reducción de potencial fraude, reduce costos y posibilita el procesamiento de información antes del arribo, una solución para los países que no pueden emitir certificados.

 

 

A nivel regional, tanto COSAVE como Nappo tienen por objetivo la articulación de los sectores público – privado, optimizar la comunicación de la norma y lograr la protección vegetal. “Organizamos grupos de trabajo para continuar con la puesta en marcha, conocer condiciones y facilitar la comunicación de la normativa internacional (NIMF 38). Nos propusimos aplicar un lenguaje claro en temas fitosanitarios como en temas referentes a la industria para que se entienda la información”, afirmó Stephanie Bloem.

Por su parte, Galiani, afirmó “Se elaboró un plan de acción entre el Comité de Sanidad Vegetal (COSAVE) y la Asociación de Semillas de las Américas (SAA) para articular tareas conjuntas y lograr mayor intromisión en el sector privado”.

“Hace un año ingresó una plaga por semilla en México. Gracias a la interacción público privada y la implementación de la normativa internacional logramos articular acciones, establecer una vigilancia nacional y desarrollar un protocolo de diagnóstico para el virus y conocer cuáles fueron los cultivos afectados y en qué zona del país se encontraban”, expresó Marlene Ortiz (AMSAC).

En referencia al panel sobre Tratamiento de Semillas, otra de las temáticas trascendentales del evento, Juan Farinati (BAYER) hizo hincapié en cómo la empresa Bayer, tras la compra de Monsanto, supo implementar y acondicionar diferentes áreas corporativas, por ejemplo, de productos, servicios y manejo de información y área digital, para el desarrollo de nuevos procesos para el tratamiento de semillas.

Por su parte, Carlos Becco (Indigo), quién también participó del panel señaló: “Los productos biológicos tienen un enorme potencial para una nueva agricultura. Son una alternativa sustentable y novedosa y presenta desafíos y oportunidades”. Y continuó: “Es un mercado con enorme potencial y satisface a los productores, consumidores y ayuda a la sustentabilidad”, cerró.

Asimismo, Archivaldo Salvador (Syngenta Seed Care) señaló: “Desde Syngenta vemos importantes oportunidades de desarrollar nuevos productos y tecnologías para el tratamiento de semillas basados en nuevos ingredientes activos, amigables para el medio ambiente y de baja toxicidad para el hombre, así como nuevas tecnologías que permitan una aplicación puntual en los casos en que las enfermedades o plagas estén presentes en el lote de producción”.



Fuente: María Laura Nikel







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