25/08/2020. NACIONALES. Agricultura
La sequía demoró la siembra de girasol (y amenaza recortarle superficie).
La recientemente iniciada siembra de girasol de la campaña 2020/21 de Argentina se encuentra demorada en regiones claves del centro y norte del área productiva, informó la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
La entidad detalló que hasta ahora se alcanzó un avance total del 5,3 %, registrando una demora interanual de -7,6 por ciento, debido fundamentalmente al déficit hídrico que atraviesan dichas regiones. El área girasolera estimada por la entidad es de 1.700.000 hectáreas, luego de quitarle 100 mil hectáreas a su proyección original.
“De continuar este escenario de ausencia de precipitaciones, podría agravarse la situación de déficit hídrico hacia el final de la ventana de siembra para estas regiones, y provocar una nueva reducción de área en la proyección de siembra final”.
Sobre el norte del área agrícola nacional, en la región NEA, la siembra cubre el 21 % de la superficie proyectada para este ciclo. Esto se traduce en una demora interanual a la fecha de -33 %, la cual podría incrementarse en los próximos días. Sin embargo, de no revertirse este escenario en el corto plazo los productores deberán reasignar hectáreas nuevamente.
Hacia el centro del área productiva, en el Centro-Norte de Santa Fe, el avance de siembra actual es de 11,6 %, y registra una demora interanual de -6,2 %. Debido a las heladas registradas en la última semana, se ha reducido la humedad superficial, impidiendo el normal avance de las máquinas en las zonas aptas para la siembra.
Heladas intensas comprometen el estado del trigo en el norte y centro del área agrícola
El fenómeno reduce ‘las expectativas de rendimiento’, dijo la La Bolsa de Cereales de Buenos Aires. La semana pasada culminó la siembra en todas las regiones argentinas.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires dio por finalizada la siembra de trigo 2020/21 de Argentina luego de la incorporación del área remanente del sudeste bonaerense.
Luego de un progreso semanal de 0,3 puntos porcentuales, la siembra cubrió el 100 % de las 6.500.000 hectáreas proyectadas para la campaña 2020/21.
En tanto, la entidad alertó que las heladas registradas durante el fin de semana han provocado daños sobre los cuadros más avanzados del centro y norte del área agrícola, reduciendo las expectativas de rendimiento.
SE ESPERA UNA SUPERFICIE MENOR PARA EL MAÍZ 2020/21
La superficie total destinada a maíz en la campaña argentina 2020/21 sería de 6,2 millones de hectáreas, con un descenso interanual de 100 mil hectáreas, según las proyecciones realizadas por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
De cumplirse estas previsiones, la superficie marcaría una caída de 1,6% respecto a la zafra 2019-2020, pero se mantendría 13% por encima del promedio de las últimas cinco campañas.
“La recuperación del precio del cultivo en los últimos meses permite mantener una favorable relación insumo-producto en comparación a campañas previas, pero las reservas hídricas ajustadas con las que se inicia la ventana de siembra en el área agrícola ponen un límite a la cantidad de planteos tempranos”, precisó la entidad
Hacia el norte del área agrícola la imposibilidad de concretar la intención de siembra de trigo y luego girasol en la provincia de Chaco, daría lugar a una leve expansión del maíz.
En tanto, en el sur del área agrícola la regular campaña de soja 2019/20 que transitaron los productores promueve la siembra del cereal como una alternativa más estable en la rotación en este nuevo ciclo.
“La evolución de las variables climáticas y de mercado durante la ventana de siembra temprana serán determinantes para concretar la actual estimación de superficie”, aclaró la entidad.
Afortunadamente, los productores cuentan con la posibilidad de diferir la fecha se siembra hacia los meses de verano, con la siembra de planteos tardíos.
Las primeras consultas sobre la relación temprano-tardío para este nuevo ciclo comienzan a marcar un incremento de estos últimos, dadas las actuales perspectivas climáticas.
La presente perspectiva muestra una recuperación tardía de las reservas hídricas de los perfiles en el este del área agrícola, comprometiendo la siembra de lotes tempranos.
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