¿CÓMO REALIZAR LA COSECHA CON FALTA DE PISO?

Durante la presente campaña, existe preocupación de los productores por la falta de sustentación para el ingreso de los equipos de cosecha, debido a que las precipitaciones ocasionaron la existencia de suelos saturados de humedad en gran parte del área agrícola.


amanecer rural

Han comenzado a levantarse los primeros lotes de maíz y soja en gran parte del sur de la provincia de Córdoba con rendimientos muy significativos de acuerdo a consultas realizadas a productores, particularmente de la zona de la AER INTA Canals.

De allí que la actual campaña se presenta con expectativas de buenos rendimientos, pero con una honda preocupación por la falta de sustentación a la hora del ingreso de los equipos de cosecha. Esto se debe a que en buena parte del área agrícola de nuestro país, las precipitaciones promovieron la existencia de suelos saturados de humedad.

Frente a esta anormal situación de trabajo, el principal objetivo será aumentar la flotabilidad y transitabilidad de los equipos de cosecha, reduciendo la presión específica (kg/cm2) de los neumáticos sobre el suelo.

Para lograr esto hay dos alternativas: 1) disminuir el peso de la cosechadora y 2) aumentar el ancho y el largo de pisada de su tren delantero y trasero.

En cuanto al primer objetivo referido a la utilización de cosechadoras de menor peso, una alternativa es utilizar máquinas Clase 3, que poseen sistema de trilla convencional y cuentan con motores de potencia menores a 180 hp.

Pero su capacidad de trabajo es baja (hasta 3 ha/h) y debido a su obsolescencia tecnológica frente a elevados rendimientos, puede haber alta probabilidad de pérdidas por cosecha. Otros equipamiento alternativas “livianos”, son las cosechadoras de Clase 4 y 5, las cuales también poseen sistema de trilla convencional y su peso en el tren delantero no supera los 12.000 kg; pudiendo trabajar a un ritmo de 4 a 4,5 ha/h.

En general, las máquinas de Clase 5, presentan mayor factibilidad para lograr una correcta regulación frente a elevados rendimientos. Pueden transitar aceptablemente con rodados duales radiales tipo “R1” en su tren delantero. Respecto del tren trasero, pueden utilizarse rodados cuyo diámetro bajo carga sean hasta 10 cm superior al provisto como estándar, sin mayores inconvenientes sobre su sistema de limpieza.

Lo ideal sería que las cosechadoras posean trasmisión hidrostática 4x4, y al puente trasero se le coloquen neumáticos duales y el interno tipo pala. Estas cosechadoras 4x4 con duales delanteros y traseros se constituyen en el equipamiento ideal en relación a la transitabilidad y flotabilidad para situaciones extremas.

Las cosechadoras Clase 6 y 7, son las más numerosas; la gran mayoría cuenta con sistema de trilla y separación axial, donde algunas están provistas con doble tracción (DT). A partir de estas categorías es que se hace necesario “aumentar el ancho y largo de pisada en ambos trenes”, para disminuir la presión específica sobre el suelo. Buena parte del éxito de esta campaña dependerá de lo bien equipadas se encuentren estas cosechadoras.

Dado que cuentan con motores acorde a su capacidad de trabajo y mejor evolución tecnológica para adecuarse a buenos rendimientos, manteniendo una capacidad de trabajo de 5 a 5,5 ha/h., podrán utilizarse rodados duales radiales tipo R2 (semi palas) en su tren delantero y trasero. En caso de ser necesario, y en especial en la Clase 7, puede colocarse un tercer rodado en el tándem, conformando el llamado “trial”.

Esta cubierta será de un diámetro por lo menos 10 cm inferior y su presión de inflado a la mitad de las duales. La adición del trial se realiza colocando un zuncho separador, debiendo quedar unos 15 cm de espacio entre las paredes laterales de las cubiertas para permitir la descarga del barro. La fijación de este zuncho se logra soldando en ambas llantas 4 o 5 tacos roscados (distribuidos en su periferia en forma equidistante). Posteriormente, todo es unido por roscas que aprietan a presión ambas llantas al zuncho, el cual queda calzado debajo del labio externo de las llantas.

Tendremos que ser muy pacientes a la hora de empezar a trillar los lotes revisarlo ver cómo están los pisos, porque una cosechadora enterrada nos puede traer dolores de cabeza.



Fuente: Juan Marcos Giordano; Jorge Omar Sebastián Alegre, Gabriela Mastrovincenzo.







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