Argentina consolidó la seguridad alimentaria durante el primer mes de la pandemia con una explosión de consumo de proteínas cárnicas

Durante el primer mes completo de aislamiento social obligatorio determinado para evitar la propagación del Covid-19 la Argentina consolidó la seguridad alimentaria al garantizar el acceso a un nivel de proteínas cárnicas superior al vigente un año atrás.


amanecer rural
Argentina consolidó la seguridad alimentaria durante el primer mes de la pandemia con una explosión de consumo de proteínas cárnicas


A pesar de las restricciones logísticas implementadas desde fines de marzo pasado –cuando se instauró el aislamiento obligatorio– por muchas autoridades provinciales y municipales (algunas de las cuales siguen presentes actualmente), los productores pecuarios, frigoríficos, matarifes, trabajadores cárnicos, transportistas, supermercados y carnicerías realizaron un esfuerzo mayúsculo para proveer de proteínas cárnicas a la población argentina.

El crecimiento de la oferta disponible de proteínas cárnicas se explica fundamentalmente por la carne aviar, que en abril pasado registró un consumo estimado de 50,0 kg/habitante/año gracias tanto a un incremento de la demanda de pollo entero como de cortes aviares.

El dato oficial correspondiente al consumo estimado de carne aviar en mayo pasado no está disponible, pero es muy probable que durante ese mes el pollo haya superado al consumo interno de carne bovina, dado que desde entonces los frigoríficos exportadores comenzaron a priorizar ventas externas fundamentalmente destinadas a China.

El crecimiento del consumo de carne aviar se sostiene en dos pilares: el pollo entero comprendido en el programa oficial de precios cuidados se encuentra a un valor muy accesible para la población de menores recursos, mientras que los cortes resultan un producto más práctico de cocinar por parte de los estratos medios urbanos que deben mantener el aislamiento obligatorio.

En mayo pasado, por otra parte, comenzó a recuperarse la comercialización de carne porcina luego del bajón experimentado en abril, provocado fundamentalmente por el cierre de parrillas y servicios de catering y la caída de ventas de chacinados en comercios y cadenas de supermercados.



Fuente: Valor Soja







Notas Relacionadas