El gobierno brasileño destina una partida de 400 millones de reales para intentar sostener el precio interno de trigo

La ayuda se otorgará mediante el pago de dos instrumentos: Prima Niveladora Pagada al Productor Rural y/o su Cooperativa (Pepro) y Prima de Salida de Producto (PEP) ofrecida en subastas públicas que realizará la Empresa Nacional de Abastecimiento (Conab).


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El gobierno brasileño destina una partida de 400 millones de reales para intentar sostener el precio interno de trigo


El gobierno brasileño asignó una partida de 400 millones de reales (unos 79 millones de dólares) para subsidios económicos destinados a sostener los precios internos del trigo de la cosecha 2023/24.

La ayuda se otorgará mediante el pago de dos instrumentos: Prima Niveladora Pagada al Productor Rural y/o su Cooperativa (Pepro) y Prima de Salida de Producto (PEP) ofrecida en subastas públicas que realizará la Empresa Nacional de Abastecimiento (Conab).

Los productores rurales y las cooperativas pueden participar en las subastas de Pepro, mientras que el PEP está destinado a industrias molineras y empresas comercializadoras de cereales.

“El gobierno federal está igualando el precio, es decir, pagando la diferencia entre el precio mínimo y el precio de mercado para apoyar al productor en la venta del cereal”, enfatizó el director de Comercialización Agrícola del Ministerio de Agricultura, Silvio Farnese, por medio de un comunicado.

El precio mínimo de garantía fijado por el gobierno para el trigo 2023/24 –que se está cosechando en la actualidad– es de 1462 reales por tonelada, mientras que el valor de mercado en el estado sureño de Paraná se encuentra este miércoles en 1024 reales por tonelada.

Pepro es un subsidio económico que se otorga a los productores rurales o sus cooperativas que ganen el “premio igualador” en una subasta electrónica realizada por la Conab. Este premio tiene como objetivo complementar el importe recibido por la venta de un producto para que alcance el “precio sostén” fijado por el gobierno.

En lo que respecta al PEP, el comprador –que puede ser una industria o una empresa comercial– compite para obtener el “premio igualador” en una subasta electrónica realizada por la Conab y debe pagar, como contrapartida, el precio mínimo al productor rural.

La Política de Precio Mínimo de Garantía (PGPM por sus siglas en portugués) es una herramienta empleada con el propósito de reducir las fluctuaciones en los ingresos de los productores rurales y asegurar una remuneración mínima, la cual, si bien tiene una participación muy pequeña en el volumen comercial total, pretende actuar como guía referencial del mercado.



Fuente: Valor Soja







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