Evalúan remediar suelos tóxicos con especies del monte nativo

A más de 50 años del cierre de una mina de oro en la localidad sanjuanina de La Planta, los suelos de la región están contaminados severamente con metales pesados como cadmio y arsénico.


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Evalúan remediar suelos tóxicos con especies del monte nativo


Un informe elaborado por el INTA y la Secretaría de Agricultura Familiar, del cual también participaron la Facultad de Agronomía de la UBA (FAUBA) y otras instituciones, reveló que las concentraciones de estos metales en el suelo alcanzan hasta 35 veces los máximos contemplados en la legislación argentina y alertó sobre el potencial riesgo para la salud de las 43 familias locales. En este marco, los investigadores evalúan remediar la región con especies del monte nativo.

 

"Nuestro trabajo surgió a partir de un pedido de productores de cabras de La Planta, en la provincia de San Juan, quienes veían que luego de las lluvias las cabras tomaban agua de los charcos y se morían", comentó Brian Young, profesional del INTA y docente de la cátedra de Química Inorgánica y Analítica de la FAUBA.

 

Young agregó que, tras cuatro años de estudiar la zona junto con un equipo multidisciplinario, en 2017 elaboraron un diagnóstico socio-ambiental que fue elevado a autoridades nacionales y provinciales. El informe muestra claramente que los suelos del área tienen niveles muy elevados de cadmio, zinc, arsénico, bismuto, plomo, cobre, manganeso, arsénico y molibdeno. Son metales pesados que hacen que el ambiente sea extremadamente tóxico tanto para las 43 familias que habitan La Planta como para la flora y la fauna del lugar.

 

Soluciones

"Ante semejante estado ambiental nos planteamos buscar alternativas para que esta situación tan nociva no siga adelante", dijo Martina Dours, Licenciada en Ciencias Ambientales de la FAUBA. "Por eso, se nos ocurrió desarrollar enmiendas orgánicas e inorgánicas para mejorar la condición de esos suelos. O sea, es muy necesario bajar su disponibilidad de metales pesados para que sean menos tóxicos".

 

En este sentido, los resultados de la tesis de grado de Dours, muestran que es posible reducir la toxicidad de los suelos. "En el INTA Castelar probamos el efecto de agregarle al suelo de La Planta distintas combinaciones de dolomita y compost. La dolomita es un tipo de cal y sirve para disminuir la acidez del suelo. El compost se usa para aportarle materia orgánica y facilitar la inmovilización de los metales pesados. Encontramos que ambas enmiendas disminuyeron exitosamente la toxicidad del suelo, sobre todo en cuanto a cobre, plomo y zinc".

 

"En estas condiciones también realizamos bioensayos de toxicidad para evaluar si la presencia de metales pesados afectaba, y cuánto, la elongación de la radícula en bulbos de cebolla. Los resultados indican que las dosis altas de dolomita permitieron que las raíces crecieran más. Además, los suelos enmendados tuvieron una cantidad mayor de microorganismos activos, lo que detectamos a través de la cantidad de dióxido de carbono que respiraban", añadió Dours.

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En relación con estos resultados, Brian Young afirmó que los suelos que recibieron compost y dolomita resultaron menos nocivos y remarcó la necesidad de complementar los avances de Martina Dours con otras tareas y estudios que se vienen llevando a cabo en terreno.

 

Urgente y remediable

 

Young comentó que como parte de los estudios interdisciplinarios en la zona afectada se llevó a cabo una caracterización de la vegetación. "A partir del foco del problema, que es la vieja mina de oro, y por acción de las lluvias y el viento, se formó una pluma de contaminación de más de 2 km de extensión. Allí realizamos mediciones y vimos que el suelo está más descubierto y que la vegetación es notablemente menos diversa que en sitios no contaminados. Este es uno de los tantos problemas a remediar".

 

Los especialistas, a través de diversos estudios, reconocieron especies vegetales que crecen en la región y que están demostrando ser tolerantes a este ambiente degradado. Es decir, son especies con potencial para actuar como fitorremediadoras de suelos-

 

"Queremos implantar especies vegetales del mismo bosque nativo para intentar reforestar esa zona, y las deberíamos introducir con las proporciones adecuadas de dolomita y compost. Para ello, también sería ambientalmente interesante lograr que se composten los residuos de la región, ya sean agroindustriales o municipales. El área es extensa y se van a necesitar grandes cantidades para enmendar los suelos".

 

"Habrá que tener paciencia, ya que se trata de especies de crecimiento muy lento. Lo interesante es que prácticamente no hay antecedentes de una remediación usando el monte nativo en zonas áridas", señalaron con cautela Martina y Brian.



Fuente: INTA







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