07/02/2025. REGIONALES. Chaco
En la mañana de este viernes, Amanecer Rural se comunicó con el ingeniero Agrónomo Oscar Marcón, que desarrolla tareas profesionales en el área de Desarrollo Territorial de la Estación Experimental del INTA de Sáenz Peña. Para empezar estableció la definición de déficit hídrico como la falta de agua suficiente como para que un cultivo pueda crecer y desarrollarse, y cuyo déficit puede alterar su crecimiento y rendimiento. Y también depende en qué etapa de crecimiento del cultivo se genera el faltante de agua: si en la siembra, la floración, o la cosecha.
La provincia viene atravesando en los últimos años menos precipitaciones de las necesarias o normales, lo que genera poca reserva de agua en superficie (lagunas o reservorios) ni en los perfiles del suelo (pozos, perforaciones napas). Esto hacer que los cultivos sean mucho más dependientes del agua de lluvia, porque en superficie y bajo de ella, no hay.
Actualmente, casi no hubo registro de lluvias en enero, los registros están en 0 milímetros, en lo que es la zona centro de la provincia, y en caso de algodón o soja en época de floración es muy preocupante. Y mucho tiene que ver la calidad de suelo y su capacidad de retener el agua. EN particular, señaló el profesional, “los suelos de la provincia son de muchos años y están bastante deteriorados” condición que agrava la falta de lluvias importantes.
Afectación del déficit hídrico
Esta situación de falta prolongada de agua, no afecta solamente a la agricultura o cultivos de tierra, sino también la disponibilidad de forrajes para pastura de ganado, y para la bebida del ganado o hacienda de pié. “No hay reservas, ni reservorios de agua” disponibles, “y es muy baja la disponibilidad de agua” que queda, en lo que hace a pozos y perforaciones. “La situación es bastante difícil para el sector productivo”, indicó el ingeniero a Amanecer Rural.
Perspectivas a futuro
Sobre lo que se viene en materia de déficit hídrico, y teniendo en cuenta que esta es una situación que viene en la zona hace un promedio de 4 años, el ingeniero Marcón indicó que es fundamental “planificar a futuro los reservorios de aguas para bebida y pasturas para la ganadería, y con respecto a la agricultura hay que ordenar los tiempos de siembra para que en casos de falta de agua no afecte en demasía los distintos estadíos del desarrollo de los cultivos”.