10/02/2025. REGIONALES. Chaco
La semana pasada desde Amanecer Rural hablamos con uno de los especialistas del INTA Sáenz Peña para tener un pantallazo general sobre la situación de déficit hídrico que atraviesa la provincia desde hace un tiempo muy prolongado. Ahí se nos informó que la parte más afectada por esta sequía es la zona centro del Chaco.
Este lunes, Amanecer Rural tomó contacto con el ingeniero en Recursos Hídricos, Hugo Rohrmann, con quien continuamos el mismo tema pero ya enfocados sobre la situación específicamente de las lluvias y los pronósticos a largo plazo.
En primer lugar tratamos de poner un parámentro cuantitativo al déficit hídrico que actualmente se registra, e indicó que el más fácil de medir es la diferencia entre las precipitaciones mensuales y el promedio histórico de cada uno de esos meses. Con ésos indicadores el sector norte de Chaco, el centro y El Impenetrable son los que tienen más falta de agua acumulada.
Agregó que “estamos en medio de la temporada de lluvias que va de octubre a abril, por lo tanto en la mitad de febrero, marzo y abril si se dan los pronósticos del SMN, se van a generar precipitaciones normales o parecidas al promedio histórico”. “Si eso se cumple, de algún modo se va a revertir esta situación de falta de lluvias”, indicó.
Sobre la situación en particular de los ríos en la provincia, en lo que hace a los ríos menores como el Río Negro, el Río Salado o el Río Tragadero, “tienen muy poca agua; al no haber precipitaciones abundantes todos los ríos interiores descargan con muy poca agua”. Y en lo que hace al Río Paraná, “hubo una leve recuperación en lo que fue fines de enero, principios de febrero, que aparentemente se va a mantener; está en valores de 2.50 y 3 metros, aunque sigue siendo aguas bajas”, aclaró. En general en Brasil, sobre la cuenca del Paraná, las lluvias son “más o menos normales y da la impresión que por lo menos hasta mayo, se mantendrán estos valores.
Si hablamos de déficit hídrico hablamos de sequía, que “se siente en este caso de varios días de altas temperaturas y sin lluvias, en primer medida en la agricultura”, explicó. “La agricultura es la que más depende de las precipitaciones, el suelo, temperaturas acordes” explicó, y que “el primer impacto de estos ciclos cortos de dos o tres semanas sin lluvias y con temperaturas tan altas, es la agricultura”.
“Noviembre y diciembre del año pasado llovió normal en casi toda la provincia, por lo tanto esta situación actual tiene un impacto muy fuerte y definido sobre los cultivos, sobre todo los que tienen menos colchón de humedad”, fue lo que explicó Rohrmann.
Zonas más afectadas y previsión de nuevas precipitaciones
En líneas generales, explicó el especialista, el faltante de lluvia en Chaco es todo el sector menos en el sur, sudoeste y sudeste, las lluvias fueron normales. Pero, “desde la Ruta 16, el sector norte hacia Charata, Impenetrable, General San Martín, son los sectores más afectados” agregó.
Según indicó, “el pronóstico más cercano del SMN, indica para los próximos 15 días, varios días con lluvias, por lo tanto si eso se da y pensando que los meses de marzo y abril podría haber precipitaciones aproximadas al promedio histórico, eso implicaría una recuperación de las lluvias en la provincia”. De mayo a octubre, se atraviesa la temporada de falta de lluvias.
Para finalizar, el ingeniero Rorhmann expresó que este fenómeno de altas temperaturas y falta de lluvias por dos o tres semanas “está más asociado a un fenómeno de la Niña no definido, fue muy débil, se viene prolongando en el Pacífico desde mitad del año pasado, pero no se llega a definir”.
Esto puesto que los últimos meses del año pasado hubieron lluvias importantes en casi toda la provincia, pero enero y febrero casi sin lluvias. Es una “situación estacional que a su vez se suma sobre el otro sello de las precipitaciones en el Norte Argentino, es mucha variabilidad en casi los 70 años, donde hay ciclos secos, ciclos normales, y ciclos húmedos (como fue en 2019)”.