Las labores se concentraron principalmente sobre lotes tempranos del sur del área agrícola, donde los rindes fueron en su mayoría buenos, aunque en algunos casos se observaron mermas asociadas al estrés térmico e hídrico registrado durante el verano. A la espera de que se generalicen las labores sobre los planteos tardíos en el centro del área agrícola, las primeras perspectivas para este segmento son favorables. En particular, en regiones como el Centro-Norte de Córdoba y el Núcleo Norte se prevé una recuperación significativa de los rindes en comparación con la campaña anterior, cuando estas zonas fueron severamente afectadas por la chicharrita.
Sin embargo, este repunte en los rendimientos se ve contrarrestado por una marcada reducción del área implantada con maíz tardío en dichas regiones, lo que limita el crecimiento de la producción total. En este contexto, se mantiene la proyección nacional de producción de maíz en 49 MTn.