15/07/2020. REGIONALES. Chaco
El especialista señaló que en la campaña reciente "se dieron situaciones de cosecha muy favorables porque se pudo recolectar el algodón sin inconvenientes" a diferencia de la campaña anterior en la que las lluvias e inundaciones de campos provocaron pérdidas de hasta el 37 por ciento de la superficie sembrada.
Tcach sostuvo que el sector se vio afectado por la pandemia de coronavirus, por la fuerte retracción que registró la venta de manufactura textil a causa de las medidas de aislamiento y el cierre de los comercios del rubro, entre otras cuestiones.
"Hubo algunos inconvenientes que tienen que ver con el rompimiento de la cadena de pagos porque las desmotadoras no pagaron a los productores por demoras de las hilanderías y hubo desde rechazo de cheques hasta dificultades para conseguir alambres para atar los fardos de fibra de algodón", describió.
"Eso generó una gran incertidumbre porque por un lado hubo un resultado productivo interesante, pero a la vez desconcierto por el precio", que se fija en Buenos Aires teniendo en cuenta el valor de la fibra en el mercado mundial que tiene como referencia valores que se pagan en Estados Unidos, agregó el especialista.
"Al bajar la demanda de algodón hubo una retracción del mercado que tuvo efectos con cortes en la cadena de pagos", señaló y estimó que otra de la causante de esa situación fue "la baja del precio de alrededor del 20 por ciento en la tonelada de fibra".
Tcach dijo que "esta incertidumbre abre interrogantes sobre la próxima campaña tanto para Chaco como para las otras provincias que producen algodón porque el precio cubrió costos, en otros dejó un pequeño margen pero no todos cobraron las cosechas que entregaron a las desmotadoras".